Los exámenes son algo a lo que nunca te acabas acostumbrando, que siempre te hacen dar vueltas de más en la cama y probablemente culpables de alguna futura cana. Dejo aquí esta canción italiana, que termina en nuestra facultad. En cierto modo es mi manera de despedirme también de la Universidad, de sus aulas escondidas, sus bibliotecas secretas, como no, su azotea, nuestros compañeros, también los profesores, los que nos ayudaron y los que sólo por ser Erasmus nos azoraron, el Moises de Miguel Angel, los partidos de italia en clase, la famosa aula 2 dónde todo es posible, el aula con vistas al coliseo y el foro que no me dejaba mirar a la pizarra ni un segundo, el claustro en primavera, la mensa, bendita mensa en la que comiamos con sólo dos euros, el ufficio Erasmus al que llegamos por primera vez perdidos... a todos los recuerdos que este año hemos vivido y que estan repartidos en esas 4 paredes. Arrivederci Facoltà.
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