En uno de los paquetes que mi madre me envia a Roma, con dos kilos de libros gratis, dónde al final mete lo que a ella le apetece, me llego un libro de Rabindranath Tagore, poeta bengalí, premio nobel de literatura en 1913, de donde recorté este fragmento:
"Querría sentarme silencioso al lado tuyo; pero no me atrevo, no se me vaya a salir el corazón por la boca. Por eso charlo y disparato y me escondo el corazón tras de mis palabras. Le pego a mi pena rudamente, no vayas a pegarle tú."
Seguí leyendo y seguí descubriendo:
"¡He perdido mi gotita de rocío!, dice la flor al cielo del amanecer, que ha perdido todas sus estrellas."
"Si el cielo con todas sus estrellas y el mundo con todas sus riquezas fueran míos, algo más pediría. Pero si ella fuera mía, me contentaría con un rincón, el más pequeño de la tierra."
Pero mi sorpresa fue cuando me di cuenta de que una de las canciones que más escuchaba últimamente de manera incansable estaba escrita por Tagore, el ciclo de la vida, que traducida dice algo asi
"La misma corriente de vida que corre por mis venas noche y día, pasa por el mundo y en los bailes rítmicos.
Es la misma vida que se dispara a través de alegría, en el polvo de la tierra y en las innumerables hojas de hierba y se rompe en tumultuosas olas de hojas y flores. Es la misma vida que se sacude en el origen del nacimiento y de la muerte. El movimiento de mis piernas lo provocan el glorioso toque de este mundo de la vida. Y mi orgullo por vivir está bailando en mi sangre en este momento."
Siempre me han parecido curiosas las casualidades. Tenia que ponerlo.
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