lunes, 2 de mayo de 2011

Supongamos que...


Supongamos que me creo que George W. Bush y el ejercito de EEUU apoyado por la OTAN invadieran Afganistán con el único fin de detener y juzgar a dirigentes de la banda terrorista Al Qaeda, entre ellos su líder Osama Bin Laden. 
Supongamos que me creo que la invasión de Iraq asistida por diferentes países, entre ellos España, se basaba en el hecho de destruir las armas de destrucción masiva.
Supongamos que me creo que después de 10 años han encontrado al jefe de la banda, al que sin duda deberían caerle 1000 años de sufrimientos, y que un comando EEUU lo asesina con una bala en el cráneo y ya puestos a suponer, supongamos que me creo que han tirado su cuerpo al mar. 
Suponiendo que me he creído todas estas historias,  me siento a leer las noticias, viendo al pueblo estadounidense celebrando la muerte de  el que fue "su mayor enemigo" y no puedo evitar cierta sensación extraña, es extraño celebrar una muerte, aunque sea la del "mayor terrorista" de la historia,  quizás no me sacia la venganza sino justicia. En el atentado de las torres gemelas murieron 2.998 civiles, en la guerra de Afganistán, respuesta al brutal atentado, han fallecido entre 14.000 y 34.000 civiles, y en la posterior invasión de Iraq fueron entre 3000 y 8000 las víctimas civiles. ¿Después de más de 14000 muertos en Afganistán los americanos encuentran a Bin Laden y lo asesinan?, no entiendo. 
Creo que si nos pusiéramos a hablar de terroristas, que como describe la palabra son aquellos que hacen uso del terror, del miedo para coaccionar sociedades  y gobiernos, deberíamos ser implacables contra ellos, buscar la justicia, pues tanto los terroristas que asesinan 2.998 civiles en EEUU cómo los que asesinan a mas 20.000 en oriente próximo deberían pagar por ello aunque ni en mil años podrían hacerlo.
Pero la verdad es que no me creo nada de esto, no me creo la existencia de armas de destrucción masiva en Iraq, creo que las armas de destrucción masiva son gobernantes arrogantes capaces de aniquilar a 20.000 civiles y encima con el respaldo de muchos. Y lo siento pero de momento no me creo esta reaparición de Bin Laden ni vivo ni muerto, quizás murió hace tiempo y no lo sacaron a la luz para seguir en Afganistán haciendo negocio, quizás siga vivo o quizás, quien sabe, quizás digan verdad.

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